Un 03 de octubre de 2007 fallecía Rogelio Salmona a los 78 años de edad. La arquitectura colombiana se reunía para despedir a uno de los arquitectos que definió el legado del ladrillo en sus principales ciudades, referente del movimiento moderno latinoamericano y uno de los más adeptos aprendices de Le Corbusier, con quien trabajó en París entre 1949 y 1958, tras interrumpir sus propios estudios.
Como explica Elisenda Monzón Peñate, "con Le Corbusier, Salmona aprendió a repensar la ciudad y las implicaciones sociales del urbanismo, la responsabilidad en su evolución y la importancia del papel de la arquitectura como configuradora del espacio público. En esta experiencia el arquitecto bogotano también aprendió a disentir de las teorías y postulados modernos y con ello investigó y elaboró una obra que buscaba la esencia de la arquitectura".
A continuación, los invitamos a recordar algunas de sus principales obras: